Durante décadas la tecnología china se hizo famosa por su capacidad de copiar. Ahora bien: hace años que esa caracterización dejó de ser representativa, ante un país que ha hecho de la innovación una de sus prioridades estratégicas –tal y como reincidió el Partido Comunista durante la reunión anual de su aparato legislativo esta misma semana–. No hay mayor prueba de sus logros que TikTok, ahora amenazada por un posible veto en Estados Unidos. Como cabía esperar, China ha salido en su defensa.