Seamos sinceros, la privacidad en Internet ha dejado de existir, si es que en algún momento estuvo presente. Y es que a través de nuestra huella digital le ofrecemos pistas a las empresas de nuestros hábitos en la red, algo muy cotizado a la hora de sugerirnos publicidad, y básicamente, hacer que gastemos dinero, que es en lo que se basa esta sociedad que nos ha tocado vivir.