Ethereum, la segunda mayor criptomoneda, ha cambiado su protocolo de consenso a Proof-of-Stake, reduciendo su demanda de energía. Destacar el aspecto de que la minería de Ethereum era el principal consumidor de GPU de gama alta hasta 2021.
Y es que, si hablamos de consumo, hasta ahora ha sido de unos 78 TWh/ al año. Una absoluta locura mientras la humanidad reúne sus recursos para una batalla contra el cambio climático.