Google no está dispuesta a ceder el trono de la inteligencia artificial a OpenAI y Microsoft. La empres anunció la semana pasada el lanzamiento de un chatbot llamado Bard, similar al popular ChatGPT, y la inclusión en su buscador de Internet de este tipo de solución. Sin embargo, trabajadores de la empresa están preocupados por la velocidad con la que la compañía está intentando adoptar la nueva herramienta y por su fallida presentación, en la que se mostró que la IA estaba compartiendo información errónea.