Cada vez es más habitual que los móviles ofrezcan de gama alta ofrezcan grandes capacidades de memoria RAM. Cada vez usamos más aplicaciones al tiempo, jugamos con títulos de más calidad y las capas de personalización de los fabricantes cuentan con más y más funciones. Pero, ¿es realmente necesario contar con las estas capacidades de memoria RAM?
La pregunta de si “¿más es mejor?”, ha sido respondida en muchas ocasiones. «Más», puede ser sinónimo de mejor, pero en ocasiones también es sinónimo de “da lo mismo”. Lo hemos visto con las capacidades de algunas cámaras, presumiendo de muchos sensores y megapixels, allí donde la calidad fotográfica era superada por móviles con un hardware más modesto. Con la memoria RAM ocurre algo similar.