¿Cómo Implementa México su Nueva Estrategia Nacional de Seguridad?

octubre 8, 2024

El Gobierno de México, liderado por la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo y el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Omar García Harfuch, ha lanzado una innovadora Estrategia Nacional de Seguridad que busca enfrentar y reducir la violencia y la delincuencia en el país. Esta iniciativa, que combina diversos enfoques y herramientas, tiene como objetivo no solo disminuir la criminalidad, sino también atacar las causas profundas que llevan a la población, especialmente a los jóvenes, a involucrarse en actividades delictivas. La estrategia se apoya en cuatro ejes principales que abarcan desde la prevención hasta la consolidación institucional y la cooperación entre distintos niveles de gobierno.

Ejes Fundamentales de la Estrategia

La esencia de la Estrategia Nacional de Seguridad se estructura en cuatro pilares principales: atención a las causas, consolidación de la Guardia Nacional, fortalecimiento de la inteligencia e investigación, y coordinación con las entidades federativas. Estos componentes buscan enfrentar la violencia y la delincuencia de manera integral y coordinada. La atención a las causas dirige sus esfuerzos a ofrecer alternativas a la juventud y a las familias, reduciendo su vulnerabilidad ante las organizaciones criminales. Al mismo tiempo, la consolidación de la Guardia Nacional y el fortalecimiento de la inteligencia apuntan a crear instituciones de seguridad más firmes y ágiles, capaces de anticipar y reaccionar eficazmente a las amenazas.

En el eje de atención a las causas, uno de los puntos destacados es el fortalecimiento de programas integrales dirigidos a las familias y a la juventud. Entre estas iniciativas, el programa «Jóvenes Construyendo el Futuro» busca proporcionar educación y oportunidades laborales a los jóvenes en situación de riesgo para alejarlos del camino delictivo. Para mejorar la implementación de estas políticas, se ha creado una nueva subsecretaría de Prevención dentro de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, dirigida por Esthela Damián Peralta. Esta subsecretaría tendrá la tarea de coordinar esfuerzos y recursos para maximizar el impacto de los programas preventivos.

Consolidación de la Guardia Nacional

La integración de la Guardia Nacional a la Secretaría de Defensa Nacional (Sedena) es otro aspecto crítico de la estrategia. Esta medida no solo permite a los elementos de la Guardia Nacional acceder a la seguridad social del ejército, sino también recibir una capacitación especializada que mejora sus capacidades y profesionalismo. Aunque ha habido críticas que sugieren que esta integración podría conducir a una militarización de la seguridad pública, el secretario Omar García Harfuch ha subrayado que el propósito es aprovechar las capacidades y recursos de la Sedena para reforzar a la Guardia Nacional como una fuerza de seguridad más eficiente y preparada para enfrentar retos complejos.

El fortalecimiento de la inteligencia y la investigación es otro eje crucial. La creación del Sistema Nacional de Inteligencia permitirá una mejor coordinación entre los diferentes sistemas de seguridad del país, facilitando la identificación y desarticulación de células criminales. Adicionalmente, se establecerá una subsecretaría de Inteligencia e Investigación Policial que contará con analistas, investigadores de campo y especialistas técnicos. Esta nueva área tendrá la misión de mejorar la coordinación con la Fiscalía General de la República, optimizando los procesos de investigación y judicialización de los delitos.

Fortalecimiento de la Inteligencia e Investigación

Las capacidades tecnológicas y humanas del Centro Nacional de Inteligencia serán incrementadas notablemente para permitir una respuesta más rápida y eficiente ante las amenazas delictivas. El objetivo es no solo resolver delitos una vez cometidos, sino anticiparse a ellos, previniendo de este modo su ocurrencia. Para ello, se fortalecerá también el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública mediante la creación de una Academia Nacional de Seguridad que se encargará de homologar los planes y programas de estudio y garantizar una formación de alta calidad para todos los elementos de seguridad del país.

La coordinación con las entidades federativas es también un aspecto fundamental de la estrategia. En estados con alta incidencia delictiva como Guanajuato, Baja California, Chihuahua, Guerrero, Jalisco y Sinaloa, se ha previsto una estrategia de intervención específica enfocada en los delitos de alto impacto. Esta colaboración tiene como finalidad desarrollar diagnósticos regionales del fenómeno delictivo y coordinar acciones preventivas con las fiscalías locales, ajustando las estrategias y recursos a las necesidades y particularidades de cada región.

Coordinación con las Entidades Federativas

El Gobierno de México, encabezado por la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo y el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Omar García Harfuch, ha implementado una novedosa Estrategia Nacional de Seguridad. Esta estrategia busca reducir la violencia y la delincuencia mediante un enfoque integral que no solo se enfoca en la disminución de la criminalidad, sino también en abordar las causas fundamentales que llevan a la gente, en especial a los jóvenes, a participar en actividades delictivas.

Dividida en cuatro ejes principales, la estrategia abarca desde la prevención y la intervención comunitaria hasta el fortalecimiento institucional y la cooperación entre distintos niveles de gobierno. El primer eje se centra en la prevención y educación de la sociedad para evitar que las personas se involucren en el crimen. El segundo eje busca la intervención directa en comunidades afectadas por la violencia, ofreciendo oportunidades y recursos para que los jóvenes encuentren alternativas al delito.

El tercer eje se enfoca en mejorar y consolidar las instituciones de seguridad y justicia, asegurando su eficacia y transparencia. Por último, el cuarto eje promueve la colaboración entre el gobierno federal, estatal y municipal para facilitar una respuesta coordinada y efectiva ante los retos de seguridad. Esta Estrategia Nacional de Seguridad representa un esfuerzo integral y coordinado para construir un México más seguro y próspero para todos.

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