En los últimos meses, ha surgido una llamativa tendencia en los supermercados de Zamora que está captando la atención de muchos. Entre las 19:00 y las 20:00, un carrito con una piña boca abajo puede ser la clave para iniciar una conversación y tal vez conocer a alguien especial en la sección de vinos. Esta curiosa técnica, popularizada a través de las redes sociales, consiste en seguir una serie de pasos específicos para identificar a otras personas interesadas en participar en esta nueva modalidad de flirteo.
La “técnica de la piña boca abajo” ha generado muchas reacciones, desde la incredulidad hasta la risa, pero no cabe duda de que ha despertado la curiosidad de más de uno. Poco a poco, esta tendencia se va extendiendo y atrayendo a quienes buscan formas originales de conocer gente. Aunque aún no se sabe si se convertirá en una práctica común, es indiscutible que ha logrado captar la atención del público.
Seleccionar el Horario
El primer paso para participar en esta interesante forma de ligar es asistir al supermercado en el horario considerado ideal, que es entre las 19:00 y las 20:00 horas. Este periodo no es casual, ya que es una hora en la que muchas personas hacen sus compras después del trabajo y están más relajadas. Entrar al supermercado durante este tiempo incrementa las posibilidades de encontrar a otros participantes de esta ingeniosa modalidad.
Colocar la Señal
El segundo paso es colocar una piña boca abajo en el carrito de la compra. Esta particular manera de ubicar la fruta es el símbolo que indica la disposición de quien la lleva a participar en el juego de conocer gente. No se trata solo de una piña cualquiera, sino de la forma específica de colocarla, lo que envía una señal clara y directa a los demás.
Dirigirse a la Sección Adecuada
Una vez que se ha cumplido con el paso de la piña, el siguiente movimiento es dirigirse a la sección de vinos del supermercado. Este lugar se considera la zona de encuentro de quienes están siguiendo esta nueva tendencia. Al ir a esta área, se incrementan las posibilidades de coincidir con otra persona que también lleve una piña boca abajo en su carrito.
Romper el Hielo
El segundo paso de este curioso ritual es colocar una piña boca abajo en el carrito de la compra. Esta singular manera de posicionar la fruta no es una simple excentricidad; es un símbolo inequívoco que comunica la intención de la persona que la lleva de participar en un juego social orientado a conocer gente nueva. No se trata únicamente de una piña, sino de la forma precisa en la que debe posicionarse. Al invertir la piña, se envía una señal clara y directa a los demás compradores. Esta señal no es una coincidencia ni un error, sino un código socialmente reconocido entre aquellos que están familiarizados con este tipo de interacción. De esta manera, la piña boca abajo en el carrito de compras se convierte en una llave que abre puertas a nuevas conexiones y oportunidades sociales. Es una forma ingeniosa y visualmente específica de comunicar disponibilidad social sin necesidad de palabras, transformando un simple acto de comprar en una experiencia social potencialmente enriquecedora y emocionante.