El Ministerio de Salud de la Nación ha decidido eliminar el Programa de Salud en Contextos de Encierro mediante la Resolución 2/25, una medida oficializada este lunes. Este programa había sido creado en 2012 durante la segunda presidencia de Cristina Kirchner, con el objetivo de mejorar la calidad en el acceso a la salud de las personas detenidas en establecimientos penitenciarios tanto federales como provinciales en todo el país.
Objetivos del Programa de Salud en Contextos de Encierro
Mejorar el acceso a la salud en cárceles
El programa pretendía facilitar el acceso al cuidado de la salud de las personas en cárceles y equiparar la atención sanitaria que reciben con la dispensada en entornos no penitenciarios. Para lograrlo, se buscaba fortalecer los sistemas de salud penitenciarios y propiciar la implementación de políticas públicas diseñadas por el Ministerio de Salud de la Nación en unidades penitenciarias y alcaldías. Además, se hacía énfasis en la necesidad de equiparar el nivel de servicios médicos y tratamientos, garantizando así que los internos recibieran la misma atención que cualquier ciudadano libre.
Otro objetivo significativo era el establecimiento de un sistema de información estratégica que incluyera la vigilancia epidemiológica y el monitoreo de la calidad y el impacto del programa. Este sistema habría permitido una supervisión constante de la salud de las personas en contextos de encierro, promoviendo la detección temprana de enfermedades y la intervención oportuna. También se pensaba en la recolección de datos que permitirían orientar las decisiones y ajustar las políticas a las necesidades reales de la población carcelaria. Sin embargo, la falta de implementación efectiva de este componente del programa resultó ser uno de los factores que condujeron a su eliminación.
Fortalecimiento de los sistemas de salud penitenciarios
La visión del programa contemplaba no solo la mejora en la atención inmediata, sino también un fortalecimiento integral de los sistemas de salud dentro de las penitenciarías. Las políticas públicas diseñadas por el Ministerio de Salud estaban dirigidas a capacitar al personal médico y a contar con los recursos necesarios para una atención de calidad. Además, se buscaba la cooperación y articulación constante entre los diversos niveles de gobierno para asegurar un sistema cohesionado y eficiente.
No obstante, el Ministerio de Salud justificó la derogación del programa argumentando que las jurisdicciones provinciales y las penitenciarías federales ya cuentan con sus propios sistemas de salud organizados. Estos sistemas, según el Ministerio, aseguran el acceso a la salud de la población carcelaria, implicando una redundancia de organismos –tanto nacionales como provinciales– en una misma problemática. En este contexto, se consideró que era más eficiente concentrar los esfuerzos y recursos en los sistemas existentes, en lugar de mantener un programa adicional que no presentaba beneficios claros y evidentes.
Razones para la eliminación del programa
Duplicación de esfuerzos y recursos
La falta de datos estadísticos e indicadores sanitarios que demuestren que la implementación del programa ha producido beneficios basados en evidencias en la toma de decisiones en salud durante la detención y al momento del egreso de los establecimientos penitenciarios fue una de las razones clave para la eliminación. Sin una base de datos sólida y confiable, resulta complicado medir el impacto real de cualquier programa y justificar su continuidad y financiamiento. Esto fue percibido como una duplicación innecesaria de esfuerzos.
Adicionalmente, la Resolución N° 2536 del 20 de septiembre de 2021, que formaba parte de este marco normativo, no ha resultado operativa ya que no se firmó ningún convenio con las provincias y, por lo tanto, no se implementaron los informes de gestión esperados. Esta falta de ejecución efectiva y coordinación con las provincias implicó que los objetivos del programa no se cumplieran como se había previsto originalmente. En consecuencia, las autoridades determinaron que era más apropiado dirigir los recursos a otros sistemas ya establecidos y con mejores resultados.
Ineficacia y redundancia del programa
El Ministerio de Salud de la Nación ha decidido suprimir el Programa de Salud en Contextos de Encierro mediante la Resolución 2/25, una medida que fue oficializada este lunes. Este programa, instaurado en 2012 durante el segundo mandato de Cristina Kirchner, tenía como propósito fundamental mejorar la calidad del acceso a la atención médica de las personas privadas de libertad en establecimientos penitenciarios tanto a nivel federal como provincial en todo el territorio nacional. El objetivo era garantizar que los detenidos pudieran acceder a servicios de salud adecuados, sin importar su ubicación. Este programa constituía un pilar importante para asegurar que los derechos humanos en materia de salud no fueran vulnerados dentro de las cárceles. La eliminación del programa ha generado preocupaciones entre las organizaciones de derechos humanos y los defensores de la salud pública, quienes argumentan que esta medida podría derivar en una atención médica inadecuada para una población vulnerabilizada.