Tras décadas de monopolio, en 2021 la operadora DAZN se coló en la subasta de derechos de la liga profesional de futbol (conocida como LaLiga) para robarle a Telefónica un 45% de los derechos de emisión. Motivo por el cual se especula con la subida de precios de la plataforma rusa.
Esto hacía que Telefónica tuviera unos partidos por jornadas y DAZN otros, lo que dividía a los usuarios y fans que querían ver todos los encuentros. O te suscribías a ambos servicios o te quedabas, cada jornada, con partidos que no podías ver.