La plataforma de ‘streaming’ Twitch, que ha experimentado un enorme crecimiento en tiempos de pandemia, ha actualizado sus políticas para prohibir las conductas graves e indebidas que pueden afectar a su comunidad de usuarios aunque ocurran fuera de la plataforma, en especial en lo que se refiere a las incitaciones al odio y el acoso. La nueva normativa del servicio se aplicará en los casos donde haya «evidencia comprobable disponible» de conductas graves fuera de Twitch, incluyendo otras redes sociales, servicios en línea e incluso fuera de Internet.