No es raro encontrarnos por Internet con v-tubers (o vr-tubers), youtubers y streamers que ocultan su rostro (y el resto del cuerpo, en realidad) tras avatares virtuales (frecuentemente de estética manga). En algunos casos, incluso, llegan a ocultar su voz tras una voz alterada o enteramente sintetizada. Pero, de vez en cuando, nos encontramos con algún v-tuber que no oculta ningún rostro, cuerpo o voz reales: sencillamente, tras ellos, sólo encontraremos una mera inteligencia artificial. Y una de ellas, precisamente, está siendo noticia en estos días en Twitch.