WhatsApp es una de las aplicaciones de mensajería instantánea más populares del mundo, y un claro ejemplo son sus más de 2.000 millones de usuarios activos. Al ser una plataforma grande, es común que los piratas informáticos estén pendientes de las vulnerabilidades del servicio.
Si bien la app de Meta proporciona un entorno de comunicación seguro y cifrado de extremo a extremo para proteger la privacidad de los usuarios, también enfrenta desafíos en términos de seguridad.