Ayer mismo saltaba la sorpresa: Twitch anunciaba que a partir de ahora permitiría una amplia gama de «desnudos artísticos» a sus creadores. Las nuevas normas —por otra parte, llenas de contradicciones— abrían incluso la puerta a la aparición de desnudos completos en CGI en las emisiones en streaming.
24 horas después, esta misma mañana, las consecuencias de la inesperada decisión de Twitch resultaban ya obvias: la categoría de ‘Arte’ de la plataforma se había convertido en un caos pornográfico, sobre todo de la mano de contenido ‘anime’. Y la situación no le estaba haciendo gracia a muchos veteranos de la plataforma.