Desde que fue presentado hace algo más de un mes, el chatbot de Open AI, ChatGPT, ha dejado boquiabiertos a usuarios de todo el mundo gracias a su buen funcionamiento. La IA, efectivamente, es capaz de mantener conversaciones plausibles con el usuario; incluso puede escribirle redacciones o ensayos sobre cualquier temática imaginable si el internauta se lo pide. Evidentemente, esto ha provocado que numerosas instituciones académicas y universidades se muestren preocupadas por el hecho de que sus estudiantes comiencen a recurrir a estas herramientas para copiar.