La lucha contra los ciberdelincuentes parece continúa y si no que se lo digan a Google. La compañía ha decidido plantar cara a un trío de estafadores que se hacían pasar por la tecnología de la compañía para sembrar el caos en la red.
Estos, identificados como «DOES 1-3» en la demanda, crearon sitios de redes sociales fraudulentos, alegando ofrecer descargas del famoso chatbot de inteligencia artificial de Google, Bard.